El día 21 de septiembre supone un cambio favorable para la vida de muchas personas. Así es, porque con la llegada de la primavera, que significaría algo así como “primer verdor”, aparecen los días más soleados y calurosos, los paisajes más verdes, más variedad de flores y frutas, el cantar de los pajaritos, más vida al aire libre, entre muchas otras cosas. Pero este buen panorama no es compartido por todo el mundo, porque con la llegada de la primavera aparecen también las denominadas “alergias primaverales” que hacen sufrir a una parte considerable de la población. Síntomas como la congestión nasal, enrojecimiento de los ojos, conjuntivitis, estornudos sin control, picazón y ardor en la garganta, tos y dificultad para respirar terminan haciendo que ésta época del año sea una verdadera pesadillas para los alérgicos. Y es que no debe ser nada agradable que mientras la mayoría de las personas disfrutan de los días más cálidos y largos, otros sólo se dediquen a suplicar que la primavera se acabe rápidamente.
Las patologías más comunes a causa del excesivo polen existente en el aire en la época primaveral son: la conjuntivitis alérgica, rinitis alérgica, dermatitis, asma bronquial y anafilaxia. De todas ellas, lejos la más común es la rinitis alérgica, que afecta principalmente a la nariz, y que hace que la mucosa nasal se inflame, exista picazón nasal y excesivos estornudos. Cabe mencionar que ésta patología muchas veces es confundida con un resfrío común. La diferencia entre ambas es que, un resfriado común no debería durar más de una semana y la rinitis alérgica sin tratamiento puede permanecer toda la temporada. Además, la rinitis se presenta con una picazón de la nariz insoportable. El tratamiento para todos estos malestares es variado y existen muchas posibilidades para combatir el mal. Lo más frecuente es el uso de antihistamínicos, que calman los despreciables síntomas característicos como los son la picazón nasal y los estornudos. Además existe una variedad de remedios naturales para quienes eviten el consumo de fármacos. Por últimos te dejo algunos tips para hacer de esta estación un periodo un poco menos fastidioso:
-Usar lentes para el sol: te ayudan porque ofrecen una barrera entre el polen y los ojos.
-Ducharse antes de dormir: tu cuerpo aloja todas las partículas del día, por eso una ducha antes de dormir puede marcar la diferencia. Eso sí que éstas sean cortas y con agua tibia.
-Evitar abrir las ventanas en la mañana: el mayor registro de polen se concentra en la madrugada, por lo que ten cuidado y no abras mucho las ventanas.
-Mantenerse hidratado: toma mucha agua.
-Evita los perfumes: todos los olores fuertes no son recomendables, éstos te irritan y causan picazón.
-Mantener todo limpio: Así ayudarás a reducir el polvo.
